miércoles, 27 de septiembre de 2017

SONETO INDEPENDIENTE (o cómo estafar más que antes)




Tanto dolor por las venas sin sangre,
tanto sabor acre de pena y duelo,
tanta desidia corriendo sin suelo,
tanta flor sin pistilo ni estambre,
tanto cuento sin cuentas y con hambre,
tanta carencia cerrada a dinero,
tanta mentira siendo tan sincero,
tantas manos atadas con alambre,
por qué seguir caminando hacia el cielo,
por qué quemar a los desiguales,
por qué mirar siempre con tanto ego,
será mejor limpiarse de votantes,
abandonar al pueblo con su fuego,
y seguir estafando más que antes...

ANTES



Antes, cuando me amabas,
antes de que nada pasara,
porque realmente nada pasó,
antes, como decía, antes,
cuando el rojo tan sólo era un color,
y las noches de luna llena
eran contadas,
y los amaneceres
duraban toda una mañana,

antes, cuando las flores
se marchitaban al mirarlas,
cuando yo me desangrabas en palabras,
y en el abismo de mi locura dura
todo era cordura desinteresada,
antes, como decía, antes,
cuando me hundía en tus ojos sin sol,
y el amor no tenía remedio ni alma,
y las caídas no se acompañaban del dolor,
antes cuando me amabas,
antes cuando había amor.

jueves, 21 de septiembre de 2017

ETC, O TREINTA AÑOS NO ES PARA TANTO























'Etcétera, o treinta años no son para tanto' da título al cuarto poemario
 de Iván Mendoza, que presentó ayer en el Centro Cultural Ibercaja


Iván Mendoza Marrodán Poeta«En cada poema remarco 

en negrita palabras o letras 
que, a su vez, forman otro poema»


«No me considero un poeta, yo juego con las palabras», 

asegura Iván Mendoza.
 Un juego que le ha llevado hasta el relato corto, algún monólogo, 
la poesía rimada con diferentes métricas e incluso a empezar una novela. 
Este joven riojano (aunque nacido en Badajoz) 
acaba de presentar su cuarto poemario,
 'Etcétera, o treinta años no son para tanto',
 prologado por el autor riojano Andrés Pascual.


-Cualquiera diría que la treintena (tiene 32 años) le ha decepcionado.


-No. Quizá te asusta cumplir años y al final ves 

que no es para tanto, porque todas las etapas 
de la vida tienen algo. 
El 'etcétera' es como unos puntos suspensivos 
en la carrera de escribir, 
de intentar ser poeta, aunque yo no me considero poeta.


-Curiosamente, su trabajo (es maestro de Educación Física)
 tiene poco que ver con la poesía.


-Hay que cultivar un poco todo, por dentro y por fuera.


-¿De qué habla en este poemario?


-Hay poemas de amor y también reivindicaciones 

o crítica social 
sobre cuestiones actuales: la crisis, la alternancia en política, 
la corrupción... 
Lo he escrito con versos alejandrinos, sonetos, romances...
 y en cada poema remarco en negrita palabras o letras que,
 a su vez, forman otro poema.

-Ese recurso ya lo había utilizado en su obra 'El mundo detenido'.

-Sí, lo usé en mi segundo libro y lo voy a coger 

como seña de identidad.
 Es un recurso que me inventé y he decidido continuar con ello.
 Más que nada es jugar con las palabras; son como un puzzle 
con el que voy construyendo poemas.


-¿Cómo escribe poesía, de un modo disciplinado

 o a golpe de inspiración?


-Siempre voy con unas hojas y un bolígrafo, 

y cuando me surge una palabra 
o un verso lo apunto. A partir de ahí elaboro
 el poema, lo dejo reposar un tiempo 
y luego lo retoco o no.


-La música, la actualidad, el amor... todo le inspira.


-Sobre todo la música, porque es lo que más escucho.


-¿Y sus referentes poéticos?


-Hay de todo, desde Góngora y Becquer, 

hasta Sabina o Kutxi Romero 
(cantante del grupo 'Marea').


-Precisamente Kutxi Romero le prologó el 'El mundo detenido'.


-Sí, es una gran inspiración porque 

me gusta mucho cómo escribe.


-Su madre, la escritora María José Marrodán,

 ¿influye o interviene en su trabajo?


-Siempre le envío cosas para conocer su parecer y mejorar. 
Ella me aconseja y es un gran ejemplo para mí.


-Aunque no se considera poeta, ¿seguirá en la poesía?


-Seguiré insistiendo a ver si algún día me publican 

en una editorial de las grandes, 
porque hasta ahora son todo autoediciones o coediciones.